Shoplifters (2018), es una película de Hirokazu Koreeda. Este drama emotivo se desenvuelve en los suburbios de Japón, en una pequeña casa donde vive un grupo de personas relegadas que a diario buscan cómo sobrevivir, y que a pesar de su historial delincuencial, tienen muchas ganas de amar.
Shoplifters es una película con planimetría muy romántica, compuesta de una fotografía cálida y una dirección de arte excepcional. Aunque sus incidencias musicales no son tantas, esa ausencia no se marca, pues trabaja muy bien el silencio. Su final se alarga innecesariamente, como forzando la narrativa.
Cinco personas de diferentes edades viven en la misma casa, un día llega una nueva integrante, y a partir de ese momento descubriremos la bondad y rutina de estos marginados. A pesar de que la película muestra la deshonra en la forma cómo estas personas se ganan la vida, nunca los juzga por lo que hacen, al contrario, expone cómo a partir de estos actos ellos logran construir y sostener un hogar juntos, de donde emana un gran amor con lazos de unión profundamente fuertes. Es a partir de esta exposición y de frases incisivas que va soltando la historia cada tanto, que la película desmenuza, cuestiona y desmonta el concepto de familia de la Política Pública japonesa: ¿se puede elegir a la familia, o eso es algo con lo que ya cargamos? ¿Se es madre por el simple hecho de parir? ¿Qué es eso que mantiene a las familias unidas? La película responde, pero la realidad es diferente, tiene más vacíos, y se impone, finalmente, sobre los protagonistas y sus deseos.
El hilo conductor de la historia está dado por la toma de malas decisiones. Sin embargo, la construcción narrativa está edificada de forma que el espectador se haga cómplice de dichas decisiones y las avale en nombre del amor fraternal, pero el mismo filme se encarga de deconstruir esa empatía, y mostrarnos cómo realmente funciona el mundo, dejándole a los protagonistas impetuosas lecciones.
Este filme interioriza en la intimidad de cada uno de los integrantes de esta familia alternativa, para poder poner al descubierto cuál es el vacío que tiene cada uno, y cómo este se ve resanado con la inferencia de los otros en su propia vida, y así, nos describe el diario de esta familia, porque finalmente eso es lo que son, aunque les impongan ese derecho de otra forma.